Los habitantes de Junkville ’ t escribe un elenco sobre nosotros y yo ’ t oír una sola historia sobre “ forma cónica le diable ”. El diablo puede ser invisible, pero el jefe Daniel nos trata con el mayor cuidado y respeto. Dos hombres en bicicleta con ropa sucia acogen definitivamente diferente en África que en Europa. Pero no tengo ninguna manera de experimentar con los colores de piel diferentes para un estudio exhaustivo...

Daniel es un muy buen hombre viejo y las paredes de su casa están decoradas con carteles graciosos. Jennifer Lopez muestra sus piernas entre Bibie y Omar Bongo, mientras que Jesús está mirando desde la otra esquina. Tal vez el diablo golpeó mi rueda trasera: misma esté deshinchada al salir de Junkville. Lo inflar otra vez dos veces, después de lo que parece unir. Aunque no estoy muy seguro, y el camino no es el tipo de uno quiere estar varados en carretera.

En efecto, estamos a punto de cruzar un parque nacional. Al parecer la Lopé, al principio, como cualquier otra reserva de caza en África, con elefantes y animales salvajes. La diferencia es que nuestra ruta va bien a través de él. La sección de la ruta económica entre Alembé y en Lastoursville pasa a lo largo del río Ogooué en el norte del parque.

En Sudáfrica, ’ s prohibido salir de su coche en un coto de caza y ’ s incluso aconsejó no se abra la ventana más de un tercio. Aquí, nadie parece preocuparse por nosotros ciclismo a través de él. Me pregunto si estaremos parados en la entrada y le preguntó a montar el segmento peligroso en un camión, o nos veremos obligados a pagar por una escolta armada. Después de todo, hay Panteras allí y he ganado ’ t defenderme con un timbre de bicicleta y un trípode.

Después de sólo 8 kilómetros, hacemos nuestra primera parada, cuando vemos los mangos. Es la temporada. En Senegal, fue en mayo, y ahora en Gabón, es en diciembre. Pero están lejos de ser tan grande y tan delicioso como en Casamance.

Hablar en español con un Equato viviendo aquí. A pesar de la inmensidad del mundo hispano, dice que Guinea Ecuatorial es el único país en el mundo, además de España, que habla Castellano adecuado. Agrega lo que fácilmente puede conseguir una visa para España, y que su hijo está estudiando allí. Sin embargo, el asunto de la visa está lejos de ser recíproco … Guinea Ecuatorial es casi hermético a los extranjeros y seguro que no turísticas. Lo confirma, diciendo que hay un “Ley de prevención de la gente para tomar fotos” allí.

Nosotros seguimos en bicicleta hacia arriba y hacia abajo. Pensé que sería más bien plana, siguiendo el río, pero el camino no está optimizado en absoluto. Sin embargo, la superficie es bastante bueno. Incluso si no está pavimentado, las máquinas de clasificación están haciendo un buen trabajo. Al parecer, los chinos están construyendo desde el otro extremo.

Desde que nos fuimos Junkville, no ha habido cobertura telefónica en la selva. Lo ’ s no sorprendente. Lo más gracioso es que alguien tomó el cuidado de marcar cuando es posible captar la señal.

Necesitamos para recorrer 50 kilómetros hasta el pont d ’ Ayem, el puente Ayem, que marca la entrada correcta del Parque Nacional de Lopé. A pesar de las colinas, nunca logramos obtener una visión de lo que nos rodea: el ares árboles siempre demasiado alto y demasiado intrusivo. Pero después de perder un montón de agua, finalmente llegamos a un punto de vista.

El viaje en el camino de tierra está muy caliente. Debemos mantener un ritmo sólido para llegar a la localidad de Lopé y completar esos 75 kilómetros en el día. Podría parecer fácil, pero el tiempo vuela. De 8 a 18, no tenemos tiempo para relajarse: ciclismo, tomar fotos, encontrar o preparar la comida, comiendo, viendo a los animales … ’ no es tan fácil para relajarse o: cuando nos ciclo, por lo menos el viento nos refresca un poco. Detenido, incluso en la sombra, sentimos que sudar más mientras el ciclismo.

Mi sudor es empapando mi camisa. Cuando pasa un camión, se eleva el polvo, que se mantiene en suspensión durante muy largos minutos. Lo entiendo en los ojos; mi camisa mojada también recoge todo y me siento como un trapo humano. Cerca de 12, realmente sufren el calor. Lo ’ s cuesta arriba y ahí no está viento. Parece que si hay un horno abierto justo en frente de mi cara y alguien me sigue con un lanzallamas.

En el 75 PK, finalmente llegamos al puente Ayem: el Parque nacional comienza!

El Parque Nacional de Lopé es la más conocida de Gabón. Situado en el centro del país, fue la primera área protegida en el país y fue agregado a la lista de patrimonio de la UNESCO en 2007.

No hay ningún puesto de entrada o algo así. Sorprendentemente, ya estamos en la tierra de los elefantes y panteras. Muchos lugareños nos han dicho que podemos ’ t cruzar la Lopé sin encontrarse con un animal. También hemos recibido consejos sobre cómo reaccionar en caso de elefantes y búfalos descansan en nuestro camino. Al parecer, no hay ninguna amenaza: don Panteras ’ t ataque humanos y animales grandes eventualmente dejará el camino.

A pocos kilómetros después el puente Ayem es la ciudad Ayem. Es más grande que lo que esperaba, y es por el ferrocarril. Ahora estamos en el mismo lado del Ogooué con el ferrocarril y hay una cité SETRAG hospedaje a los trabajadores de la compañía ferroviaria.

Hay al menos un tren diario, a menudo más. El ferrocarril se utiliza para transportar el manganeso de la mina cerca de Moanda (que visitaremos más adelante) y también los pasajeros entre Libreville (Owendo) y Franceville. Ambos servicios son operados por Comilog, el operador de la mina.

No tenemos tiempo de inactividad y cabeza directamente al único lugar en donde están disponibles bebidas frías Ayem: a los senegaleses detrás de las pistas. Hacemos un almuerzo fuera de una lata de guiso y continuar Lopé ciudad.

Pronto después de dejar Ayem, Cyril se detiene en el lado de la carretera de tierra.

Un guarda forestal confirmará posteriormente que las huellas pertenecen a una pantera.

El camino es muy pintoresco. Ahora estamos seguros de llegar a ciudad de Lopé antes de la noche. Estamos viendo a los animales, deberían estar alrededor en la noche, especialmente teniendo en cuenta que queremos ’ t hacer ningún ruido.

No vemos ningún elefante y llegamos en Lopé. El ferrocarril se mantiene bastante bien. El único inconveniente son los camiones omnipresentes: ellos nos repintan con el polvo rojo cuando ellos la velocidad justo al lado de nosotros.

Cierra tus ojos, cierra la boca y la nariz y espere un minuto …

La pequeña ciudad de Lopé, procedentes de Alembé, se esconde detrás de la Mont Brazza. La colina lleva el nombre de Pierre Savorgnan de Brazza, el explorador francés de origen italiano que viajaba por el río Ogooué a “ encontrado ” (ya había gente allí) Franceville en Gabón y Congo Brazzaville.

Lopé está iluminado cuando lo alcanzamos. Hay electricidad y un número relativamente alto de luces de la calle, porque, aquí también hay una estación de tren. Es realmente extraño ver a alumbrado público por todo un pueblo. Incluso en grandes ciudades, el alumbrado público es rara.

Todos en Lopé parecen ser un extranjero. Somos tienda en el mauritano y comer en la Guinea, frente a la farmacia de un senegalés (quizás). Lopé es un sous-préfecture y tiene 500 habitantes, es el asentamiento más grande de la zona.

Cyril tenía el contacto del director del centro de salud. Nos hemos problemas para encontrarlo, y los generadores se descomponen en la noche: la ciudad es abandonada a la oscuridad. Para un lugar tan pequeño, la presencia del Parque Nacional dio crecimiento a alojamiento para todos los presupuestos: el agradable hotel de Lopé (100 ’ 00 CFA, 150 € / noche) para los turistas adecuados visitando el Parque nacional, el hotel para turistas baratos o los ricos locales (30 ’ 000 CFA), el hotel de passage para los locales (5000 CFA) y el hotel con sexy carteles cerca de la estación de tren (9000 CFA).

Finalmente encontramos a Brice y podemos dormir en el centro de salud.

Me paso el día siguiente con el lavadero y la moto. Tuve otro pinchazo en mi rueda trasera y pierde así la base de la válvula. Lo ’ es un milagro que llevó a cabo el aire durante todo el día. Al mediodía, se ’ s ya demasiado calor afuera. Cuando entro en la ciudad, estoy ardiendo. No hay nadie afuera. La polvorienta pista recorre Lopé y las casas desiertas, los mauritanos mintiendo por sus boutiques y el silencio sol me hacen sentir en el lejano oeste. Los pocos peatones usan un paraguas (muchos de ellos son sombrillas promocionales de las últimas elecciones) como una sombrilla. Pero el Toyota es el vehículo preferido.

Como los niños, vamos a saltar en el río. Es la única cosa que hacer. Así como una rara oportunidad para lavarme el pelo.

A pesar de escuchar muchas veces sería definitivamente encontramos elefantes aquí, nosotros ’ t veo todavía. Veo un cocodrilo pequeño o un monitor funcionando. Hay huellas de los elefantes, justo detrás de un nuevo compuesto de casa. Es el final de temporada de mango, por lo tanto, los elefantes han estado visitando las aldeas. También aprecian mucho kassava, plátano y maní hojas, que es lo que generalmente se cultiva.

Como Cyril lograron encontrar el guardabosques de quienes antes de que se nos dio la información de contacto, nos embarcamos para que un safari en jeep corto noche para finalmente ver esos elefantes. Conducimos 30 kilómetros en los caminos de tierra del parque. El guardabosques dice el pájaro hemos oído muchas veces los últimos días es la Gran Touraco azul. Hace un sonido muy fuerte y característico que confundieron con un mono al principio. Otra de las aves locales es la Tockus Clypicterus.

El Parque nacional sólo atrae a 3000 visitantes al año. En comparación, dos de los parques más populares en África, Kruger (Sudáfrica) y Serengeti (Tanzania) reciben respectivamente 950 ’ 000 y 350 ’ 000 visitantes anualmente.

Solo vemos búfalos, Lamentablemente somos mala suerte con los elefantes. Pero tenemos otra jornada de ciclismo en la Lopé mañana.

El parque también está protegido debido a su historia de la civilización, con restos de arte rupestre y las técnicas.

Lopé es otro lugar gastronómicamente deprimente. Los alimentos sólo son pollo y arroz, vendiendo alrededor de 2000 CFA, fácilmente dos veces más de lo que estoy acostumbrado. Y el pan vendido aquí es de Libreville. No puedo creer que pan es transportada de 300 km de distancia para ser vendidos aquí. Esto demuestra lo difícil que es conseguir algo de comida en Gabón. ¿Por qué no se hornea pan en la ciudad? Hay sin embargo pequeños panes disponibles, deliciosos, probablemente hechos por un mauritano, pero en pequeñas cantidades.

El huevo para el desayuno cuesta Lopé en 250. Fue a lo sumo 100 CFA de África occidental. Estoy pensando en esos precios como si venía de Dakar o Cotonou. Parece que la vida en África Central es significativamente más cara y la comida mucho peor.

El camino polvoriento cata como hierro corrugado nos lleva más lejos este. El calor es todavía terrible y nuestras botellas de agua están vacías después de sólo 10 km. Hay que rellenar en la bomba de agua de Kazamabika, otro pequeño pueblo con un Far West touch.

Unos kilómetros más lejos, nos paramos otra vez a investigar la selva y encontrar los monos. Ramas de los árboles se mueven como si hay algo en ellos. Terminamos por ajustar el camino, que siempre es agradable aquí. Un camino de tierra de buena calidad es el mejor.

El lugar a mirar es en realidad el piso. Nuestras bicicletas están estacionados en pasos de elefante.

Atacado por las moscas y abejas que impiden que nos deja más de un minuto en el mismo lugar, Cyril ya se ha ido. Me aventuro más lejos en el Monte siguiendo los pasos.

El camino conduce a Sabana detrás de los árboles. Me pregunto qué voy a encontrar.

El camino, tal vez por los elefantes, me lleva a un estanque donde tres búfalos resto. Búfalos son pacíficos, pero todos los lugareños dicen que pueden cobrar a los seres humanos si se sienten amenazados. Me acerco al estanque y empiezan a correr, afortunadamente, en la dirección opuesta.

Cuando regrese a la carretera principal, veo más monos, demasiado pequeño y demasiado rápido para ocultar. Hay muchos restos de elefantes a su alrededor, donde pasa un río.

Se detuvo en el pueblo de al lado, Cyril me dice que los elefantes visitaron al parecer el lugar el ayer por la noche para comer mangos. Perdimos. Vienen a las aldeas en la noche y regresar a la selva antes de la mañana.

Cuando en Togo, tuve ya escrito sobre el monopolio de la Grupo Castel, mediante empresas locales casi homónimo y vendiendo los mismos tragos. Primero descubierto en Senegal, botella de cervezas y refrescos en toda África occidental. Sobraga es también uno de ellos.

Es muy difícil encontrar un lugar para descansar sin ser molestado por las abejas. Por último nos detendremos en un río para un almuerzo y un baño rápido.

Como en Ayem, Río Ogooué marca el límite del parque y salgamos de la Lopé sobre una estructura de acero. Todavía no hemos visto a los elefantes …

El primer pueblo después del puente de salida es Ramba, el pueblo pigmeo. Estaba contento de visitar un auténtico pueblo pigmeo, pero rápidamente desilusionó. Nos "recibe" por el pueblo duro en el bar de la carretera principal. Antes de decir que aquí nos detuvimos a buscar agua, estamos pidió para ellos comprar alcohol e informó que fotografiar está prohibida (a menos que nosotros pagamos) y que hay una cascada detrás de la aldea (que también cuesta dinero para ver).

Apenas hemos visto a cualquier turista en Gabón. Hubo sólo aquellos turistas occidentales y chinos en el elegante hotel en Lopé, pero no hasta los vimos en las pocas calles de la ciudad. No me gusta la gente que piensa que los blancos están aquí para dar cervezas gratis y dinero gratis. Hmmm... que haría demasiada gente, lo diré: no me gusta la gente que pide abiertamente a cervezas y dinero tan pronto como aparezcan los blancos. Ramba no es un sitio turístico, solo pueblo como muchos otros, conocido para ser habitado por pigmeos colocados. Tiene una cosa más: nuevas lámparas solares. Los pigmeos viven en África Central)mapa de la distribución), principalmente en los bosques tropicales.

Entiendo que los viajeros que desean disfrutar de sus vacaciones pueden ’ t encontrar muchos lugares para ir a África. En términos generales, lugares remotos que la gente más amable, pero son difíciles de llegar y tener un “ nada que ver ”. Sitios turísticos están a menudo mal organizados y la gente es todo menos agradable. Entonces, siendo sólo los paquetes sin complicaciones caros donde los operadores llevan a los visitantes a lugares remotos.

Sólo queremos una Coca-cola fría y tal vez pasar la noche si conseguimos una buena sensación. Sin embargo, las únicas bebidas frías disponibles son cervezas y hay sensación de todos modos no es bueno. Simplemente llenamos nuestras botellas de agua con el agua de pozo asqueroso (que tiramos poco después, tal vez los dos hijos deformes vistos allí son víctimas de agua).

Nosotros no podemos ciclo rápido en este mal camino, pero nos las arreglamos para llegar a Carrefour Leroy, el “ pueblo grande ” nos contaron. En el cruce, preguntamos dónde está exactamente el pueblo. “Es allí, usted lo acaba de pasar“. La aldea está compuesta de 3 casas y 2 habitantes. Pero muy bien se suministra (per cápita): 1 bomba de agua y 2 lámparas solares nuevas.

Carrefour Leroy es relativamente bien conocido en la región porque es donde los chinos terminará el nuevo camino, a partir de Mikouyi. Por cierto, hay un grupo de 6 congoleños actualmente construyendo el futuro campamento chino, destinadas a albergar los empleados Sinohydro. Mientras que preguntar acerca de camping, el jefe del equipo de construcción ofrece una habitación en uno de los edificios de madera acabado sólo. No es nada más que una losa de hormigón con paredes de madera, pero es perfecto para la noche. Nos bañamos en la bomba, desnuda en la selva, bajo las estrellas en el cielo 8 millones.

Los trabajadores hacen una fogata de la gran cantidad de madera de desecho. Tres cuartas partes de Gabón ’ superficie de la tierra s están cubiertos de bosques, por lo tanto, no hay escasez de buena madera. El jefe nos dice que para poder comprar alimentos (arroz y pollo) para su equipo, debe viajar 64 km hacia el oeste o 57 km hacia el este hasta la primera tienda. Sabemos que hoy hicimos 64 km y confirmamos que no hay nada en el camino (pero duros pigmeos con cervezas). Dice que hay tres aldeas con tiendas a lo largo de nuestro próximo 100 km. logísticamente, Gabón se siente como el desierto del Sahara: no hay comida disponible para cientos de kilómetros por el camino llamado N1!